EL NUEVO BALAÍDOS

MUNDO CELESTE

El nuevo Balaídos. Obra del arquitecto vigués Pedro de la Fuente (vía FDV)

Por Diego Bermúdez

El pasado domingo, Faro de Vigo anunciaba una noticia esperada por muchos celtistas. Tras muchas (demasiadas) promesas de renovación y construcción, el “Concello” de Vigo y el Celta acordaban la transformación del estadio Municipal de Balaídos.

La modernización integral del vetusto coliseo vigués, supondrá la primera gran reforma desde que en el Mundial de España de 1982 se construyese la grada de Río. Desde entonces, muchos proyectos se han tirado a la basura ayudados por el descenso de categoría y por la grave crisis económica padecida por el Celta, lo que provocó el olvido de todas las instituciones mientras navegábamos en la categoría de plata del fútbol español. Entre tanto, mientras el Celta luchaba por retornar a la máxima división, Balaídos hacía constantes avisos de urgencia para ser reformado (ejemplo de ello puede ser la caída de cascotes en el partido contra el Numancia).

Ante la falta de ayuda de las instituciones, poco a poco el club olívico ha ido dando un lavado de imagen al estadio, tanto de manera interna (imágenes de la afición en el túnel de vestuarios) como externa (lonas con ex futbolistas destacados del club). Sin embargo, el pasado mes de mayo Carlos Mouriño (presidente del club) en una reunión con los medios de comunicación comunicaba la firme intención de lograr, con la ayuda de todas las partes (Ayuntamiento, Diputación de Pontevedra y Xunta de Galicia), la reforma del estadio vigués.

Así, parece que meses después de que Mouriño diese un golpe encima de la mesa por fin Balaídos sufrirá un intenso y necesario cambio. El nuevo Balaídos será obra del arquitecto vigués Pedro de la Puente y presentará una estructura en olas en representación a “las olas del mar pero también al movimiento de las algas en forma de cinta que ondulan con el movimiento del agua en nuestra ría”, añadiendo que “a través de las ondas penetrará la luz y habrá ventilación”, como expuso el diseñador a Faro de Vigo.

Se comenzará con una primera fase dotada de una inversión de 8 millones de euros (6 de los presupuestos municipales y 2 de las arcas del club) para modificar por completo las gradas de Río (la más deteriorada de todas las gradas) y Tribuna. En primer lugar, como informa el diario vigués, se estima un plazo de 4 meses con una primera dotación de 1,6 millones destinada a reforzar la estructura de la grada de Río con contrafuertes y a la sustitución de las piezas dañadas de la cubierta por una nueva cubierta de correas metálicas y paneles de chapa de aluminio con luxacote en ambas caras. A su vez, se actuará internamente otorgando más seguridad y servicios a la grada, de manera que con la mejora de los recorridos de evacuación y de las instalaciones se eviten los atascos producidos en los vomitorios del estadio. La licitación de estas obras está prevista para la próxima semana, de forma que comiencen los trabajos en el mes de septiembre.

A continuación, según indica el Faro, en 2015 se iniciará una segunda fase con un presupuesto de 2,5 millones destinados a colocar la estructura externa del estadio (chapa de aluminio y policarbonato opal) que simulará las olas. También se continuará con la mejora de la accesibilidad en la grada de Río, instalando nuevas puertas y barras antipánico, así como un nuevo elevador para el acceso de las personas con discapacidad.

Además de la grada de Río, entre este año y el 2015 se reformará la grada de Tribuna a través de una dotación presupuestaria de 4 millones que incluirá, al igual que en Río, el refuerzo de la estructura y la mejora de los servicios. Sin embargo, la gran novedad radica en la idea de extender la grada de Tribuna hasta sólo 4 metros del césped (en la actualidad está a 12,3 metros), creando una única grada y despareciendo por tanto la grada de Preferencia. La prolongación de la grada de Tribuna permitirá disponer de más asientos (se prevén 15 filas nuevas). Asimismo, se pretende construir debajo de la nueva grada de Tribuna (en el lugar que ocupa actualmente la grada de Preferencia), la nueva zona de vestuarios, de manera que los jugadores puedan entrar y salir al terreno de juego por el centro del campo (como en la gran mayoría de estadios) y no, como hoy en día, por uno de los laterales. Sin embargo, nada se dice respecto a si la nueva estructura metálica cubrirá los nuevos asientos y por tanto a los aficionados de las constantes lluvias que padecemos en Galicia.

La nueva grada de Tribuna (vía FDV)

Por su parte, como señala Faro de Vigo, las reformas de las gradas de Marcador, Gol y Fondo se acometerán en sucesivas fases, dónde se eliminarán las torretas de iluminación situadas en los laterales de Tribuna con Gol y Marcador para colocarlas en la parte superior de la nueva estructura. Desde el Concello olívico se garantiza el uso normal de las gradas de Río y Tribuna. Si bien, todavía está en fase de estudio como ejecutar la reforma de ampliación de la grada de Tribuna para evitar tener que desplazar temporalmente a los aficionados de la grada de Preferencia.

En definitiva, han sido muchos los bocetos que se han llegado a plantear sobre Balaídos. Sin embargo, parece que por fin este será el definitivo. Aún así, conviene no descuidar que estamos próximos a celebrar nuevas elecciones municipales, por lo que no es de extrañar que las reformas y modificaciones realizadas en el estadio vigués sean objeto de una medida dirigida a alcanzar la mayor cantidad posible de votos. Por otra parte, desde que Mouriño llegó a la presidencia, y salvo unos inicios titubeantes, prácticamente ha conseguido todo lo que se ha propuesto, desde el ascenso, pasando por una salvación holgada, hasta el futuro comienzo de la construcción de la ciudad deportiva. Además, a nivel económico el club está muy cerca de alcanzar deuda cero (prevista para dentro de dos años, sino hay venta de futbolistas). Con todo esto, no es de extrañar que muchos pidamos que el nuevo Balaídos lleve el nombre del presidente y sea denominado estadio “Carlos Mouriño”.