Rafinha conduciendo el
balón en el encuentro de la pasada temporada en Balaídos (vía
libertaddigital).
El Celta busca torpedear al
submarino amarillo y prolongar su buena racha.
El Celta buscará mañana -a las 17:00
horas- en el estadio municipal de Balaídos prorrogar una racha que
le permitiría mantenerse invicto en este inicio de Liga. A su vez,
una victoria incrementaría todavía más la distancia -ahora está
en 4 puntos- con su máximo competidor que no es otro que el propio
Villarreal y serviría para demostrar que el 6º puesto
clasificatorio no es flor de un día. Por su parte, el “submarino
amarillo” querrá reducir distancias con la zona noble de Primera
División, si bien existe un dato negativo y es que nunca ha ganado
en Balaídos -aunque sí lo logro su filial con gol del querido Natxo
Insa-. Las estadísticas están para romperlas y esperemos que, una
temporada más, continúen a nuestro favor.
Berizzo ha dado a conocer hoy la
convocatoria para mañana. Las novedades son el regreso de Madinda y
Mina a una lista de la que se caen Borja Fernández (por decisión
técnica, por lo que bajará a jugar con el filial) y Augusto (tras
su lesión el viernes pasado frente al Elche en el Martínez Valero,
que lo tendrá en torno a las 6 semanas de baja). El resto, los
habituales. Durante la rueda de prensa, el míster céltico dejó
entrever que el once titular será el habitual de los primeros
partidos de Liga y que los cambios realizados en el anterior partido
se debieron únicamente a rotaciones que oxigenaran al equipo.
Además, el “toto” también deslizó la posibilidad de jugar con
línea de 3 atrás o retrasar la posición de Radoja, debido a que
los castellonenses juegan con doble punta.
Así pues, el once que
partirá mañana en Balaídos podría asemejarse al compuesto por:
Sergio en portería, resguardado por una defensa de cuatro compuesta
por Planas y Jonny -quién parece le ha ganado en la carrera por el
puesto a Hugo Mallo- en los laterales y por Fontàs y el capi Cabral
como pareja de centrales. Por delante, Radoja ejercería de pivote
defensivo y podría incrustarse entre los centrales para sostener a
los delanteros amarillos, estando acompañado en los interiores por
Krohn-Dehli -ha arrastrado molestias durante la semana pero ya está
recuperado- y por un Pablo Hernández que necesita destapar el tarro
de las esencias que aún guarda en su manga. Arriba, volvería el
tridente letal formado por Orellana y Nolito -estrella celeste y
máximo goleador nacional en lo que va de 2014, pero está en un
equipo demasiado grande como para ir a la Selección- como extremos y
por Larrivey como 9 de referencia.
En cuanto al rival, el “submarino
amarillo” viene de caer derrotado en el Madrigal ante el Real
Madrid por dos goles a cero. En cambio, el pasado jueves goleaba al
Apollon por 4-0 para colocarse como líderes de su grupo de Europa
League. A pesar de la victoria, ha sido una semana complicada para el
técnico amarillo debido al fallecimiento de su padre. Asimismo, el
partido de Uefa se cobró a Rukavina como víctima, que cayó
lesionado con un esguince de tobillo y es duda para el encuentro de
mañana. A esta baja, se le une una enfermería repleta de defensas,
con Musacchio, Jokic y Jaume Costa lesionados.
De esta manera, el
once que Marcelino García Toral podría sacar este domingo en
Balaídos sería similar al compuesto por: Asenjo en portería,
escoltado por una defensa de cuatro compuesta por Mario y Marín en
los laterales y por Gabriel y el ex-valencianista Victor Ruíz en el
eje de la zaga. Por delante, la calidad en el mediocampo por gracia
de Trigueros y Bruno como centrocampistas y con Cherysev y Cani
abiertos en bandas. Arriba, una doble punta formada por Uche y Gio
dos Santos.
Parada milagrosa de Yoel
en el partido de la pasada temporada.
El árbitro Álvarez Izquierdo, del
colegio catalán, será el encargado de impartir justicia en un
choque muy interesante para el espectador neutral. Ambos conjuntos
desplegan un fútbol intenso y atractivo. El Celta busca prolongar a
7 sus jornadas invictos y aumentar también a 7 la distancia con el
Villarreal. El conjunto valenciano busca lamerse las heridas de su
buen partido contra el Madrid, consiguiendo una victoria “in
memorian” del padre de Marcelino.
Con más de una semana de descanso,
será necesario estar muy firmes en la presión e intensidad, de
manera que se evite el juego del Villarreal. También servirá para
conocer si el equipo se lo toma como contra el Elche y va de menos a
más o si sale en tromba como en los últimos partidos ligueros.
Mañana, domingo, a las 17:00 horas,
un auténtico partidazo en el municipal de Balaídos, donde el Celta
tendrá que torpedear al “submarino amarillo” si quiere irse con
tranquilidad al nuevo parón de selecciones.
Escrito por Diego Bermúdez de
@mundo_celeste
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